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15-Antonella:

Luego de pensar un poco. Les hablo de una persona que yo considero importante pero no este no es un caso sentimental. No obstante reconozco que claramente ella tiene grandes posibilidades de conmover, no es persona de la que uno pueda decir, “común”. Todo lo contrario, es una pieza entramada e interesante. Aunque claro es dinámica y sin embargo insegura, las dos armas del artista que es fuego y agua a la vez. La confusión es parte de ese devenir. Talento genial, no se puede pedir que no sea lo que es. Es el gesto el que le da el toque de distinción por el cual uno puede decir. Claro, es ella. No se trata de una mujer que tenga dudas comunes no es una mujer que piense en la dependencia de un mundo como este para con las mujeres. Se resiste a ser ese objeto tonto de la burguesía. Gracias, a todos los santos que no quiere ser eso. Gracias, a los grandes y a los pequeños exegetas. Obviamente que soy observador neurótico complicado absurdo eso no importa esta a la altura de una descripción como esta. Puedo decir que en cierto punto pongo entre comillas mi oficio puedo sentir que a un ida y vuelta en algunas cosas. Siempre es interesante eso. Porque de alguna manera ayuda a sacarme el tedio de mierda que suelo sufrir, es decir el aburrimiento. Porque es obvio que para eso están los artistas y las mujeres artistas y más aún, si como dije se resisten a ser objetos de la burguesía.

Cuando se la ve, la cachetada de la primera impresión es algo interesante. No es una simple cachetada sino algo más. Es un guiño, una sonrisa y una lágrima. Porque en el fondo no es la ilusión sino la creación de la ilusión, es decir, la seducción cosas muy propias de una artista nata. Cuando sigo su arte lo conjugo con vida, y en eso no puedo errar. Su vida es de alguna manera una conjugación permanente al hecho que hace arte incluso en su vagancia y lo es más cuando se dedica a perder el tiempo. También puede encantar con esa liviandad asesina que siempre cae simpática. Eso no es poco, jamás podría serlo. Hay veces que es necesario poder despegarse todo aquello que para mal nos acostumbra a lo horizontal, cerrándose a toda interpretación futura. No temer es parte de ese impulso que a veces parece separarla algunos centímetros del suelo.

Hay que verla como una mujer que sufre la porquería de estar encerrada en una situación que de alguna manera la fuerza a esos espacios comunes y ridículos que nosotros tenemos por normales. Cuando fue perdiendo su timidez propia de una mismidad muy grande hizo de sí, un personaje casi surrealista, en el sentido pintoresco de la palabra. Lo absurdo le queda bien y cuando, más cerca esta del capricho, mejor. Su forma de ser es un tipo de vida difícil porque esa… no es una mujer que ese regala sino que roba. ¿Por qué robar?, porque todo artista roba la atención desde lo vulgar y la estupidez. Un atentado a la maldita corrosión de lo corriente, esa es su excentricidad que sé que amo. Pero como dije antes, ella es ante todo una artista y cuando vi tenía que sorprenderme. Lo que pintaba o escribía decía, decir cuando se tiene con que es portar verdad es ser alguien, así es una artista y si no le tuviera algo de envidia ¿cómo creen que la podría tratar? Ella dijo alguna vez que me admiraba eso significa que la envidia es mutua, esto es genial de alguna manera. No me tengo que disfrazar de algo por lo menos no demasiado. Ahí esta la magia, tenemos la misma cepa maldita y quizás no seamos nada al fin como todo eso que se termina consumiendo en medio de un siglo inhumano y vacío plagado de estupidez  despersonalizada pero no importa.

Prosigamos al fin. Obviamente que sus tacones ojala destrocen cabezas algún día y que tenga ese espacio para vivir eso que creo que merece su “libertad”. Su ansiada libertad, que seguro la va llegar lejos a la gloria o al desastre pero lejos al fin. Cuando uno disfruta con alguna cosa que ella hace, eso es lo peor se disfruta. Es decir no es que es un tema de quedar bien, me gusta decir lo que digo en este caso. Es un poema surrealista reforzando la idea. Tiene esas cosas que vienen en frasco chico, delicatessen. Claramente no es para algún simple transeúnte, a menos claro que ella quiera jugar con él y el otro entienda como debe jugar. Porque en el fondo ella dispone un poco, y un poco se entrega al azar y a los tironeo de lo que se le presenta. Por supuesto que si uno quiere conocer a una persona que le hormiguean las impresiones y que de alguna manera no se deja vencer. Ahí tienen la mujer. Eso es divertido es un espectáculo, es casi actriz, debería serlo porque sabe que es la escena. Entiende lo banal y lo acotado que puede ser un pedazo de tierra. Tiene ese desprecio, esa valor de poder decir no, cada tanto y mantenerse. Ella sabe de lo que se trata esto y si no lo sabe lo aparenta bien.

No podemos pedirle que no espere ni que nos justifique lo que ella quiera contarnos. Ese es su arte, es el arte de ir y venir como la marea, o el viento, o el tiempo que pasa. El otoño y todo lo que implica la muerte y la vida. El sexo como ritual, necesidad y arte. Es parte de ella, estar al borde de su propia sensibilidad, tener los nervios como antenas. Yo les digo disfruten si la cruzan y si la cruzan la van a ver. Diviértanse porque vale la pena tenerla cerca o lejos, pero vale la pena. Tiene como les digo, eso que conmueve. Una fuerza contenida no esta siendo otra cosa que ella y le importa todo bastante poco. Eso es arte, ojala que en parte lo que alguna vez le haya dicho le sirva para algo. Porque ella misma en su frenesí se auto depreda. No tiene sentido verla en esos momentos parece que el caballo frenase en su carrera ante el horror de la carrera. Pero todos amamos verla correr ¿qué importa el horizonte?
En el mismo caudal de ideas, podría yo pensar de alguna otra manera. Pero no creo que eso pueda serme útil en todo caso lo sería no inventar pero lo fantástico y lo real pueden convivir muchas veces en los relatos. Más cuando como digo las personas esta encerrada en geografías complicadas que no les dejan ser realmente. Como claramente tantos otros contextos de cartón donde al fin y al cabo, la cara de indiferencia por la propia vida parece no ser síntoma sino causa de todos los malestares.

No obstante no es tan sencillo creer que la ficción se domina. Nunca lo será, el mundo del sueño es complicado y más cuando se torna feliz. Si cuando esto ocurre no pasa la voluntad despertar, las nubes e incluso las montañas pasaran por encima de nuestras cabezas. Pero no es esto un escalera fatal para seguir cayendo sino como toda catedral incompleta, un proyecto magnifico y a largo plazo. Ya les dije es el arte y la artista, hecha carne y sangre que crece entre las ruinas de lo que se supone que tendría que ser.

Su deseo es llama constante y por eso no se puede saber cuando va a parar. Pero tanpoco se podría saber porque ha empezado. Estos despertares anónimos en medio de la oscuridad, solo pueden existir si en otra parte un ojo que no se inmuta, conquista la poca luz. Por eso no es propiedad de nadie y ama correr lejos. Tanto que al fin no es que se haya perdido sino que tal vez los otros estén aún en el camino intentando alcanzarle.

Porque ama lo que no se soporta y de alguna la controversia le sienta bien. No puede pensar que sus acentos se salen del diagrama. No fue hecha sino para resaltar en medio de una plebe que de lejos piensa que al fin y al cabo puede importar algo. ¿Es orgullo? O respeto. Yo no lo puedo decir. Sino que en todo caso imagino una de las posibles respuestas. La más fuerte, la que me desprende la intuición es la siguiente. Solo espera al fin por la llave que le permita saltar allende los mares. Tanto más lejos mejor, porque no puede ser de nadie tiene vocación universal. Tener en parte esa alma apátrida y renegando contra la corriente posee el cuerpo necesario para no disolverse en la vorágine de los reflejos infinitos que perturban la conciencia.

Es el misterio de una mujer que se inventa todo los días y toda nos sorprende. Es al fin y al cabo una artista que no sabe otra cosa que vivir del arte.   

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