Este año en medio de una crisis internacional para los mercados emergentes dió una respuesta mucho más contundente de lo que pensaban muchos. Por eso como en el final del "neoliberalismo" por llamarlo de alguna manera, el fin de la reforma del Estado, la realidad de lo negativo de todos estos procesos, no se discutieron "principios" sino consecuencias. Hoy vemos que en e Brasil estamos viendo las consecuencias y no los principios. Cuando Lula llegó a su máximo de popularidad entre 70%-80%, en Brasil y Latinoamerica había un apoyo importante al menos "bolivariano" de los gobiernos progresistas, y en este sentido, la izquierda acusaba a Lula de haberse aliado a las finanzas, y de haber inmovilizado gran parte de los planes originarios del PT.
Pese a todo esto, la oposición brasileña en especial el ex presidente Fernando Henrrique Cardoso y otros, buscaron hacer notar que el Lula era un demagogo, incapaz, y otras cuestiones por el estilo- esto se hizo en nombre de la conveniencia, y en este sentido, Brasil tuvo una clara pauta de concenso que coincidió con el Lava jato y Menselao, el dinero de la política y el dinero de las empresas fueron la prioridad, los planes sociales, la incorporación millones a la clase media, fue parte de una estrategia más global y distintiva pero hasta secundaria. En esto vemos que la clase dominante brasileña tiene un contenido bien claro de cuál es el límite, el PT para sobrevivir y sus más altos cargos fueron podando la capacidad de lucha de los sindicatos, los encuadraron dentro del Estado y quedaron presa del éxito en sus políticas sociales y del ciclo económico. Porque no reformaron el sistema político en el fondo, el PMDB se mantuvo incolumne, y la lógica de que hay que pagar por cada ley, y hay que financiarse via empresas para poder mantenerse en el poder, siguió intacta, además de un progresivo e innegable enriquecimiento progresivo de la cúpula del partido.
Pese a todo esto, la oposición brasileña en especial el ex presidente Fernando Henrrique Cardoso y otros, buscaron hacer notar que el Lula era un demagogo, incapaz, y otras cuestiones por el estilo- esto se hizo en nombre de la conveniencia, y en este sentido, Brasil tuvo una clara pauta de concenso que coincidió con el Lava jato y Menselao, el dinero de la política y el dinero de las empresas fueron la prioridad, los planes sociales, la incorporación millones a la clase media, fue parte de una estrategia más global y distintiva pero hasta secundaria. En esto vemos que la clase dominante brasileña tiene un contenido bien claro de cuál es el límite, el PT para sobrevivir y sus más altos cargos fueron podando la capacidad de lucha de los sindicatos, los encuadraron dentro del Estado y quedaron presa del éxito en sus políticas sociales y del ciclo económico. Porque no reformaron el sistema político en el fondo, el PMDB se mantuvo incolumne, y la lógica de que hay que pagar por cada ley, y hay que financiarse via empresas para poder mantenerse en el poder, siguió intacta, además de un progresivo e innegable enriquecimiento progresivo de la cúpula del partido.
A partir de esto se puede ver una radiografía muy necesaria, de como el PT fue acercándose hacia el poder, y cómo se le abrieron las puertas a las mayorías desde el gobierno y a las mesas de negociación a todo nivel. Dirceu, el monje negro del PT es necesario como son necesarios en casi todos los partidos del mundo que gobiernan, tenemos a Barcenas en España del PP, el ministro de planificación Julio De Vido en Argentina y el actual candidato a vice presidente Carlos Zannini y en Estados Unidos, John Mc Cain, Donald Runsfeld, etc., etc., etc. En este sentido, Dirceu es la parte necesaria de la política brasileña porque el par fue mucho más audaz de que Collor, puede que sobrevivan a esta crisis política, no hay que ser hipocritas, la TV Globo y otros grandes medios aumentan el escándalo, pero sólo porque se pone en juego varias cuestiones económicas en medio de una recesión muy importante, la cual hace recordar que fue la hiperinflación la que llevó tambien a Collor a su ruina.
El PT es una estrcutura distinta a lo que es Lula, si bien hay lulistas, y estos son una parte, y una intelectualidad amaestrada al uso que se desvive diciendo que Lula es el mayor lider de la historia de Brasil eso no va a cambiar la crisis actual. En todo caso puede mostrar el éxito personal de Lula como político. Hay que dejar de lado el bronce. De todo se ha aprendido que o se tomaba la línea sucia que sería defender a Dirceu, el cual sus apologistas más duros dicen que nunca le fue probada ninguna causa o dejarlo caer. Se lo dejó caer en nombre de la "transparencia", y esto estiro dos mandatos, la continuidad del PP en el poder. Todo lo que se quiera decir en otros casos es risueño, por ejemplo las comparaciones con Venezuela, ¿acaso Diosdado Cabello pasaría por el proceso de Dirceu? ¿Tiene sentido siquiera preguntárselo? Se entiende que no, y se entiende que la justicia no será especialmente buena con el PT y que el PT ha hecho poco por ganar influencia en ella, como en los medios. Si uno quiere ser maquiavélico esto ya tiene un costo, y los progresistas que sobreactuan, parece que por un cambio de ministros, Dilma se hubiese hecho traidora. En este sentido, el sistema post-dictadura de Brasil está intacto, el tranfugismo, Cunha teniendo independencia e impunidad social para "jugar con la corrupción" y una clase media con baja politización que sin programa va a ir a pedir a Dilma otra vez que se vaya, el resto de los reclamos concretos de calidad de vida de los pobres de Brasil quedan descartados, el ajuste está en pie, la devaluación también y el plan de infraestructura es una nebulosa pero va a ir al mismo empresariado.
Con todo, este sistema en sus momentos de crisis o salio por medio de estos arreglos, o salió por medio de esta hipocresía. Brasil ha tomado entonces como pauta este hecho pero menos el capricho y los criterios dudosos con los cuales se procede. ¿La caída de Dilma y Lula son posibles? Bueno nuevamente, el PMDB tiene sus dudas, Cunha es sólo el ala más ambiciosa, y hasta se supone que quiere ser presidente, pero el resto mucho más preocupado por la importante cantidad de ministerios que tienen actualmente y piensa en sobrevivir, Aecio Neves, aspirante al poder, hereda el ajuste, y supongamos que pudiera colgarse de la bancarrota del PT, tiene el difícil precedente de que investigar a todo un partido, su cúpula, sus tesoreros y sus campañas, por eso Dilma estuvo a punto de evitar el desastre con la mentada "reforma política"- esto es la crisis de Brasil. La crisis entre un evento ya intentado muchas veces, un juicio político, empresarios libres al cabo de un tiempo gracias a las "delaciones", y funcionarios que van a arrestos domiciliarios, e incautación de bienes.
El PT es una estrcutura distinta a lo que es Lula, si bien hay lulistas, y estos son una parte, y una intelectualidad amaestrada al uso que se desvive diciendo que Lula es el mayor lider de la historia de Brasil eso no va a cambiar la crisis actual. En todo caso puede mostrar el éxito personal de Lula como político. Hay que dejar de lado el bronce. De todo se ha aprendido que o se tomaba la línea sucia que sería defender a Dirceu, el cual sus apologistas más duros dicen que nunca le fue probada ninguna causa o dejarlo caer. Se lo dejó caer en nombre de la "transparencia", y esto estiro dos mandatos, la continuidad del PP en el poder. Todo lo que se quiera decir en otros casos es risueño, por ejemplo las comparaciones con Venezuela, ¿acaso Diosdado Cabello pasaría por el proceso de Dirceu? ¿Tiene sentido siquiera preguntárselo? Se entiende que no, y se entiende que la justicia no será especialmente buena con el PT y que el PT ha hecho poco por ganar influencia en ella, como en los medios. Si uno quiere ser maquiavélico esto ya tiene un costo, y los progresistas que sobreactuan, parece que por un cambio de ministros, Dilma se hubiese hecho traidora. En este sentido, el sistema post-dictadura de Brasil está intacto, el tranfugismo, Cunha teniendo independencia e impunidad social para "jugar con la corrupción" y una clase media con baja politización que sin programa va a ir a pedir a Dilma otra vez que se vaya, el resto de los reclamos concretos de calidad de vida de los pobres de Brasil quedan descartados, el ajuste está en pie, la devaluación también y el plan de infraestructura es una nebulosa pero va a ir al mismo empresariado.
Con todo, este sistema en sus momentos de crisis o salio por medio de estos arreglos, o salió por medio de esta hipocresía. Brasil ha tomado entonces como pauta este hecho pero menos el capricho y los criterios dudosos con los cuales se procede. ¿La caída de Dilma y Lula son posibles? Bueno nuevamente, el PMDB tiene sus dudas, Cunha es sólo el ala más ambiciosa, y hasta se supone que quiere ser presidente, pero el resto mucho más preocupado por la importante cantidad de ministerios que tienen actualmente y piensa en sobrevivir, Aecio Neves, aspirante al poder, hereda el ajuste, y supongamos que pudiera colgarse de la bancarrota del PT, tiene el difícil precedente de que investigar a todo un partido, su cúpula, sus tesoreros y sus campañas, por eso Dilma estuvo a punto de evitar el desastre con la mentada "reforma política"- esto es la crisis de Brasil. La crisis entre un evento ya intentado muchas veces, un juicio político, empresarios libres al cabo de un tiempo gracias a las "delaciones", y funcionarios que van a arrestos domiciliarios, e incautación de bienes.
En este sentido, está claro que la política no sólo es porque se lleva el ajuste, y en el que Dilma le pide a los petistas que sean disciplinados, estas "alas izquierdas" conformistas que no rompen con Dilma hacen recordar mucho a las de Syriza, son parte de la sucesión, no del problema, no de la de alternativa, estos futuros líderes quieren estar lo menos manchados posibles y verosímil que sea así. Si el PT sobrevivie a la crisis, pacta, Dirceu sigue en el purgatorio, y Lula llega al 2018 vamos a ver que el mito carismático es lo más importante y que la distancia la izquierda del PT del PSDB será bastante despreciable. Por eso, y justamente desde allí, la política brasileña entra en una crisis sistémica, todo lo que durante estos años había puesto a Brasil en las puertas del desarrollo más claro se ha frenado. Por lo que, estas semanas son cruciales en parte para entender que las alianzas del PT con grupos evangélicos, el posibilismo cada vez más fuerte, y todo lo que hizo al gobierno de Dilma más "keynesiano" por la crisis del 2008, y le dió aliados conservadores, es una muestra de los límites y que probablemente no se quiera la "muerte del PT" que es relativamente difícil, o extirpar a Lula del recuerdo popular, sólo se quiere sacar a Dilma del poder, gobernar y llevar adelante las políticas reaccionarias con más velocidad y determinación, el mismo ajuste, la misma apertura, etc.
El miedo proverbial del PT a su propia salida del poder, el calmar las aguas, el ajustar, el dejarse llevar por el momento y saber que en suma son ya parte de todo lo que alguna vez dijeron que iban a eliminar, genera fuertes dudas. La supervivencia de lo más reaccionario de Brasil es en parte culpa del mismo PT, y de una sociedad que no ha querido romper con estas pautas. Los elogios al PMDB como el orden, el PT como el orden, y el PSDB como el orden, son muestras de la preferencia de la propia burguesía brasileña. El cambio a partir de estas protestas no puede ser controlado por nadie más que estos representantes, y hay un espacio dónde el PT puede sobrevivir, pasar las protestas y evitar el juicio político por pactos no transparentes, hay que recordar la fuerte represión durante el mundial de futbol y como otras cuestiones quedan olvidadas, el resto quedará indefinido, y curiosamente será fácil de olvidar, después de todo el propio PSDB que tuvo a Cardoso, el cual compro ilegalmente su re-elección quiere imponer a un candidato que acaba de perder las elecciones, el PT podría ser un partido de oposición importante, siempre y cuando no termine de sacar los pies del Estado. Fuera del Estado el PT se astillaría muchos pedazos, y sería un resto de un partido, porque ya no parece ser crucial en muchos procesos, y si lo fuera sería a costilla de toda su dirección actual y gran parte de sus funcionarios. Es probable que el Brasil de fines de 2015 sea esencialmente más conservador y que todas las esperanzas únicamente en la pureza y el origen social de sus candidatos estén tocando su fin.
El miedo proverbial del PT a su propia salida del poder, el calmar las aguas, el ajustar, el dejarse llevar por el momento y saber que en suma son ya parte de todo lo que alguna vez dijeron que iban a eliminar, genera fuertes dudas. La supervivencia de lo más reaccionario de Brasil es en parte culpa del mismo PT, y de una sociedad que no ha querido romper con estas pautas. Los elogios al PMDB como el orden, el PT como el orden, y el PSDB como el orden, son muestras de la preferencia de la propia burguesía brasileña. El cambio a partir de estas protestas no puede ser controlado por nadie más que estos representantes, y hay un espacio dónde el PT puede sobrevivir, pasar las protestas y evitar el juicio político por pactos no transparentes, hay que recordar la fuerte represión durante el mundial de futbol y como otras cuestiones quedan olvidadas, el resto quedará indefinido, y curiosamente será fácil de olvidar, después de todo el propio PSDB que tuvo a Cardoso, el cual compro ilegalmente su re-elección quiere imponer a un candidato que acaba de perder las elecciones, el PT podría ser un partido de oposición importante, siempre y cuando no termine de sacar los pies del Estado. Fuera del Estado el PT se astillaría muchos pedazos, y sería un resto de un partido, porque ya no parece ser crucial en muchos procesos, y si lo fuera sería a costilla de toda su dirección actual y gran parte de sus funcionarios. Es probable que el Brasil de fines de 2015 sea esencialmente más conservador y que todas las esperanzas únicamente en la pureza y el origen social de sus candidatos estén tocando su fin.
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