La tarea de demolición empieza por casa:
Comencemos a contar las complicidades con el nuevo gobierno- ser cómplices va desde el tiempo que se le tiene que dar, hasta la indulgencia con las direcciones sindicales. Si se trata de tener una posición en contra al menos debería partirse de la realidad, el conflicto se da en políticas concretas, no en discursos, sentidos de las cosas.
Las complicidades con este “nuevo gobierno” tienen todo lo que era “positivo” de la etapa anterior, falsificación, conformismo, y sobre todo sostener en abstracto gran parte de los problemas esenciales del país. Comencemos a tener una garantía, democracia es una realidad, sindicalismo es una realidad, seguridad social es una realidad. Todas realidades dadas en el marco del “Neoliberalismo”.
Para entender al animal nos basta la cola, el hocico y podremos entenderlo:
¿Por qué el progresismo está padeciendo un languidecimiento bastante simpático? Simple, el progresismo es como el liberalismo en Argentina; ideologías superfluas y superficiales, sus justificaciones, son meras “importaciones”, y por esto sus amalgamas, sus puntos en común y simplemente ser “oficialismo” al uso. Intelectuales formados en tradiciones, partidos, libros, ideas, ahora son comentaristas en TV, cuentan sus vidas y sus padeceres de tener que pensar en Argentina, ¿Hay diferencia entre Novaro, Sarlo, Caparrós, Leuco? Todas las ideas independientemente de su producción intelectual anterior es ser guarnición de lo que pasa, ser comentarista de lo que pasa, Rinessi lo enseño bien en la Vulgata, “seguir la iniciativa política”, es decir cortesanos.
Para poder ser parte del “Star System” para poder compartir espacio con Ottavis y Vicky, los intelectuales simplifican, se suman y mojan el pancito, por eso los 100 días de gobierno, son un comentario simple, que no les importa que no hace a sus producciones culturales. Sarlo, cuando pudo apoyó a Duhalde como un De Gaulle, Sebreli por llamar a una rara avis, sólo pudo oponerse a otro mito de corta vida, el “Populismo”. Novaro aparentemente se dió cuenta que pagar como desde el 1983 a los gobernadores es tener “cintura política”. Todo esto es parte de la forma en que se “piensa la argentina”.
Hay que ser un poco impiadosos. Cuando la televisión abre el debate es generosa, teníamos la “Argentina para armar” de María Laura Santillán con Katz, y otros hablando de la Argentina posible y no concreta, como todos los expertos de educación tecnócratas y vacíos, estos forman parte de una casta, gente que puede opinar por titulos, pero que no les interesa que su opinión tenga aplicación alguna. Así fue que Intratables, 678, todos los programas políticos, son parte de este sistema, esta es la forma por excelencia que llega la política a las personas en tiempos de lo que era “La Batalla Cultural”. Hasta ahora, las vacas sagradas están todas en pie, Caló; fue todo lo mediocre que pudo ser, Moyano, cada vez más rico, hizo todo lo que pudo para poner a uno de los gremios “esenciales” atados de pies y manos al ajuste. El resto simplemente funcionó a la cola, ATE y UPCN están reaccionando pero una vez que la cirugía mayor ya fue hecha. Todo esto no se puso en cuenta, si se puso en cuenta, nombrar jueces de una Corte que no están, el pago a los fondos buitre que no varía demasiado de lo que todo gobierno hace para financiarse. Esto que no tiene nada de nuevo parece que sí es nuevo. Economistas, y periodistas expertos, ven novedades. Las hay, por supuesto, las hay pero son distintas, recordemos que Scioli ya había prometido un tratado de Libre Comercio con la UE y Brasil, ahora Macri se vuelca agresivamente a la Alianza del Pacífico, una especie de ALCA por etapas, en este sentido, aunque sea aburrido, la integración por la fuerza, se da a “golpe de diplomacia”.
El liberalismo local si tal cosa cabe, defiende la democracia con el PJ adentro, defiende en suma a la AGN con Etchegaray adentro, impotente y servil, en nombre de una transparencia que no le cambia la vida a nadie. En este sentido, más que el sutil baile del consejo de la magistratura donde se decide de qué manera se van a perder las causas en Argentina mucho más no se puede decir, Casanello, el que le decían Tortuga, tiene un talento, no sabe si la presidente anterior tenía o no que ver con la causa, seguramente inconducente de contar billetes en una financiera. Ahora bien, ¿Presionar sobre el tema? La lucha por la justicia tiene etapas, tiene modas, tiene enemigos, hasta Campagnoli tiene que dormir en el polvo de la historia, ¿acaso el hombre que tenía oficios dispares como perseguir la corrupción y los vecinos del Barrio Mitre cambió? Todo parece que no, pero como Nisman son anécdotas, lo importante pasa en otra parte.
Para entender la imbecilidad progresista, hay que ir por etapas, la primera de ellas es entender, se defendió a todos los gobernadores que ahora mandan a sus senadores a votar al pago de los buitres porque si los oficialismos seguían todos se quedaban perfectamente donde estaban con la novedad de Bertone, porque Alicia no era novedad. Eso fue lo que Weinfeld descubría por azar, que Weinfeld se crea distinto de Pagni sólo depende del hecho de con cuántas buenas intenciones sea Página 12.
Ahora claro está, mientras que el nuevo ministro de derechos humanos se deshace en obviedades, y expresa que Estados Unidos tuvo algo que ver con el golpe, desarma lo que era una política ampulosa pero caprichosa en derechos humanos pro democrática pero en una democracia; “A la Argentina”. Es decir una que hasta los politólogos, más “moderados”, decía que estaba plagada de zonas marrones, dificil acceso a la justicia, feudos, etc.
Liberalismo, neoliberalismo es muchos sentidos, simplemente dejar sin dinero y sin efecto programas de política gubernamental muchas veces que se quedan por el camino. La Esma que fue adaptada a otra nueva realidad, con un museo de Malvinas puramente incrustado tiene por suerte, un ministro que piensa en la eficiencia del espacio. Jozami, otro intelectual al uso puede hablar de la nostalgia de lo que ya no es. Por suerte para todos. Este avance de la política “procesista”; tiene un sentido, justificar todo lo que viene desde un lugar más lejano, designios de la Iglesia Católica, las patronales, los medios socios de esta; etc.
Oficialismo al uso es lo que han hecho en estos días. La democracia en Argentina, no es el acto eleccionario, eso fue la “Religión Cívica” de los franceses- La elección Universal, lo que hizo Yrigoyen en 1916; en Argentina, tanta proscripción y tanta dictadura militar y sobre todo tanto desprecio por las elecciones incluido el fraude patriótico lo hacen inverosímil. Los “progresistas” se han reorganizado, sus tesis son simples, la crisis, ahora nació y las medidas son todas al uso, la falta de memoria es la única garantía del intelectual, periodista y profesor progresista, en este sentido, como el liberal hacen gala de la ignorancia ajena. No tener datos claro es fundamental. La crisis actual del Peso, no es nueva, es permanente. El tipo de cambio asegurado, tuvo a Martínez de Hoz, Cavallo, Lavagna, Kicillof, Prat Gay, y todos los presidentes del central; el dólar predecible, las devaluaciones brutales, de acá nacen los gigantes de barro, los “Golpes de mercado”. ¿Qué golpes de mercado? ¿La ausencia de competencia son golpes de mercado? ¿Los préstamos a la burguesía local son golpes de mercado? ¿La Nacionalización de la deuda son golpes de mercado?- todas las soluciones ortodoxas y heterodoxas no tocan el TOTEM- ¿A quien financia la deuda?, en todos estos casos, siempre la burguesía argentina dió un golpe tras golpe, pero no de mercado, de producción por la plusvalía.
Ciertamente de esto vemos como fue la importación de ideologías, si uno ve los neoliberalismos maduros, ve Reino Unido, España, Estados Unidos, Australia, donde las ideologías progresistas y liberales, liberales de izquierda o neoconservadoras son las dos caras del neoliberalismo el capitalismo del siglo XXI a falta de socialismo del siglo XXI. Este hecho no se discute ni siquiera para hacer apología de él, en Argentina se retrocede, la garantía formal de un “Estado no genocida”, sería suficiente. En este sentido, estas son las formas en que se debaten los derechos humanos. Hasta ahora, vemos como mientras más refinada es la alienación más riesgosa son para los que sufren los ataques del Estado las garantías. Por eso los progresistas, y los liberales, sí son hábiles para saber si Obama va o viene o cuánta gente está en la plaza de mayo. Por suerte también, la interpretación viene antes, nunca después, apenas surgió el “Argentinazo”, el 24 de Marzo fue una especie de terreno de disputa porque estaba en la periferia del Estado. La idea de una fiesta cívica, versus una fecha de repudio fue una lucha concreta.
El 24 de Marzo como “Revolución desde arriba”. Tiene un efecto, crear un sentido común, este sentido común no debate nada, asume una serie desarrollos de los cuales, los críticos liberales, critican la moralidad de Kirchner, los progresistas la defienden, el cuadro de Videla se hace el hecho, los juicios a los genocidas con su vaivenes, los salvatajes a Massot, Blaquier, Magnetto, y otros se vuelven anécdotas, Carlotto, levantaba la idea en sus momentos críticos de la “Dictadura cívico-militar”; los comunicadores tradicionales, los Grondona y compañía, confesos, golpistas de varios golpes, son tomados como el periodismo libre. La pregunta misma del periodismo libre se come la pregunta de las libertades democráticas, incluida, el derecho a la protesta y la libertad sindical. En estas épocas, muere justamente Fuentealba y Mariano Ferreyra, por suerte el progresismo, lo hace cuestiones judiciales, cuando la justicia Argentina falla, se deja la esperanza en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Esto no se trata de decir que no hay cambios en la realidad social de la Argentina sino más bien, mostrar cómo se quieren meter cercos a estos cambios.
De esto viene lo que tienen que hacer los liberales y los progresistas sobre estas fechas, los primeros piden reconciliación cueste lo que cueste; con peores y mejores variantes si se quiere, ir a buscar a la DEA, la CIA, el FBI y la NSA no debería ir muy lejos de perdonar los errores del pasado, sobre todo a los perpetradores del Terrorismo de Estado. Ahora, ¿qué pasaba con los progresistas? Aparentemente para ellos, la memoria es la clave, pero la memoria es tan sórdida, y va tan lejos, que para mantenerse en pie, debe descafeinar todo.
La patria contratista es la “Burguesía Argentina hoy”:
No hay que exponer otra realidad. Lo que podemos decir, es que gran parte de los cambios modernos, son parte de las reformas neoliberales, incluida la Constitución de 1994. De esto podemos decir, que un bloque con fisuras la lleva adelante, “La Patria Contratista”. De esta algunos suben y otros bajan, los Macri, los Rocca, los Blaquier, los Cristóbal López, los Werthein, manejan los hilos de la política en el largo plazo, lo Magnetto y los Saguier hacen lo mismo, la única política que pueden manejar, no pudiendo ellos manejar las condiciones exteriores, ni las tasas de interés de Estados Unidos, ni los mercados de materias primas. No hay sustanciales diferencias, en la forma en que invierten, ganan y se van. No existe en ellos otro principio que las garantías de negocios extraordinarios, mediados por el Estado.
Es por esto, que en medio de una política concreta, los cambios de gobierno se dan a la par de que cambios en los negocios, entradas y salidas, bien podemos tener nuestros caídos e incluso presos. Podemos ver algún rico preso en Argentina por corrupción. Así vimos como algunos jefes militares están presos, y otros están fugados. Sin desvalorizar el hecho de que algunos terminan presos o no, hay cosas que son justas, usar una escala de grises poco hace a la forma en que se encara el problema.
El posibilismo, el transformismo, y el reformismo son tres caras de una misma figura, el tiempo que da margen de maniobra para inventar refundaciones, por eso el furor de los Fantino, los Del Moro, y otros, saben que para ganar espacios deben anotarse en los primeros momentos. El negocio estival de estafar a la Opinión Pública es una forma permanente de ganar espacio, sobretodo tiempo, y mientras se puede decir que el lector simplemente es más imbécil, y que lo peor es lo que seduce, no se piensa en la inestimable colaboración de repetir, simplificaciones como un rosario y jugar un moralismo justamente idiota sin otro fin que “conmover” hacer presente miserias humanas, contar billetes, accidentes, Fariña diciendo que es un preso perpetuo para que otros estén libres, Elaskar, diciendo que la ex-presidente es la Lavadora serial, y por último Lanata, parte graciosa de este elenco siendo “progresista y liberal”, siendo parte de la Opinión calificada, diciendo que todo está mal pero iría mejor, pero a la vez nada puede cambiar porque la Naturaleza argentina, algo que inventaron los intelectuales burgueses en los 20´, la naturaleza argentina en particular es idiota, mezquina, tarada, engreída y soberbia.
Mientras claro está, Caputo Construcciones sale por el este, despunta con promesas de futuro, y el Grupo Indalo y Austral Construcciones se ocultan por el Oeste. Las multinacionales, preservan tantos privilegios y sos asistidas de tal manera, que sería simplemente ridículo tomar algún tiempo para que necesario para decir que junto con el Estado, y la burguesía argentina como bloque son parte del “Eterno Retorno de lo idéntico”.
Ante lo que hace el progresista y el liberal no hay remedio, los dos descomponen el Estado, para ambos, la Iglesia de abajo y de arriba son cosas diferentes, para ambos, la mano del Ministerio de Economía no es la de Educación, la Mano del endeudamiento y la mano del impuesto no son las mismas. Para hacerlo gracioso, en un día, se van las retenciones al campo y la minería, el impuesto al IVA de los alimentos y la escala de ganancias, impuestos obvios por lo regresivo son tomados en cambios porcentuales como “Conquistas Históricas”, la miseria de la filosofía, de la ideología, de lo magro de los planteos. Sólo nos muestra espectadores que tienen buenos y malos días.
Sino como ironía final pregunten a Luis Bruschtein porque ve el progreso de Capitanich como progreso y como Malnatti que veía el infierno junto con Lanata, han dejado de ver el infierno cuando simplemente el Chaco sigue siendo el Chaco y Capitanich, puede cantar “Vamos a Volver”.
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