Referencias sobre los
nuevos problemas que están apareciendo en estos últimos meses.
Ante la pregunta de lo que es un modelo de país, manera de
decir, estructura de la sociedad tenemos que hacernos por lo menos una serie de
preguntas. ¿Quién dirige ese proceso? ¿Cómo lo hace? ¿Cuáles son sus límites?,
de allí comenzaremos a pensar las verdaderas relaciones que permiten descifrar
o no las carencias existentes.
Justamente este momento es
fundamental para poder entender aquello que estamos expresando de alguna que
otra manera. Hemos aprendido a saber cuáles son los puntos clave para entender
qué es América Latina. En esta coincidencia podemos ver cuales son las llaves
para entender un proceso que con mucho nos supera. Primero, entender que el
demonio de las multinacionales es la clave para entender la verdadera opresión
en América Latina y estas no son un fantasma, son los agentes necesarios para
que los monopolios pequeños (a nivel global pero importantes a niveles locales
puedan desarrollarse). A partir de allí entendemos cuál es la relación entre lo
que ocurre hoy y los problemas que se generan a gran escala en la región.
Primeramente estamos viendo como de 2007 a 2012 se ha llevado una de las mayores
destrucciones de riqueza de la historia. Esto quiere decir que en el mundo,
desde el trabajador súper-explotado chino para que el de primer mundo tenga su
chiche, léase (I-Pod, o lo que sea) a las destrucción generalizada del medio
ambiente sólo un pequeño grupo de personas han podido mantenerse en una
situación en la cual vale la pena decir que han ganado. Ellos han sido sin duda
el sector bancario capitalista de primer mundo. En crisis y todo, siguen
concentrando sus funciones siguen destrozando los sistemas previsionales
alrededor del mundo. Su objetivo, repetir lo que hicieron en el 73´ en
adelante, hacerse de dinero, trabajadores baratos y ampliar nuevamente el
margen de explotación. “De Milagro alemán” al New- “New Deal” de Obama con sus
intervenciones solapadas hemos avanzar condiciones generales para el retroceso
de lo que podrían ser los campos populares en todo el mundo.
Estos datos no nos pueden parecer menores. No tienen que
serlo a medida que los proyectos de las multinacionales para la región son
claros, en primer lugar seguir ampliando el margen de renta agraria, segundo no
preocuparse por la contaminación haciendo nuevamente uso del ardid, “privatizar
las ganancias, nacionalizar las pérdidas”, y esto ahora no es menor. Cuando
esto no resulta a la velocidad de los planes los gobiernos caen, y caen a la
velocidad que ellos desean que pase. Esto ocurrió recientemente en Paraguay. A
lo que vamos es, ¿Hasta cuando? Justamente es un momento confuso de movimientos
dentro de los “poderes” que conforman ese gran “Poder” o “Imperio” de Negri.
Pero por alguna razón, en esta guerra, medios, desinteligencias y desesperación
hacen que el imperialismo abra frentes.
A esto debemos entender las
relaciones de poder. Los países primer mundistas prefieren invertir en misiles
que en ayuda social, para la periferia, sólo esperan inversión en una
infraestructura del coloniaje. Esto es esperan solamente grandes obras que
ayuden a acompañar sus planes de negocios. De cara a todo esto se nos presenta
por lo menos una situación que puede ahogar los sueños más inflamados de muchos
por un futuro mejor. ¿Cómo podemos entender esto en términos simples? Primero
entendemos que el capitalismo opta por repartir la pérdida a nivel mundial,
para esto va trasladando las perdidas indirectamente. El proteccionismo, las
remesas, y la concentración en los países orígenes son las claves para
destrozar los países emergentes. Con estas armas más las intervenciones de toda
clase se quieren aumentar la brecha que pacíficamente no se está consiguiendo.
Con esto se puede entender que la extorsión por medios directos e indirectos de
explotaciones de enclave en América Latina no es una cosa menor, y en este
sentido si entran los commodities a saber: oro, plata, soja, minerales, agua, y
otros tanto. En este sentido, a peor condición económica más posibilidad de
renovación y de firma de convenios desastrosos para los países. Justamente por
eso, puede ser un momento en que las pujas sindicales tengan sentido pero no
tendrán sentido si gran parte de lo que ocurre no se observa en una escala
global.
Por estas razones se debe
proceder en una forma organizada sobre lo que podemos conocer, es decir sobre
las condiciones de vida de cada país.
Nunca antes fue tan necesario conocer al propio país, no hay posibilidades de
trazos gruesos y volantazos sin sentido en la economía nacional ni en las
economías latinoamericanas. Esto es fundamental, aunque una buena parte de la
cultura “Occidental y Cristiana” (como el primer mundo gusta mirarse esté en
decadencia no así la fase más brutal de la globalización). ¿Alguien cree que
esto es ser agoreros del desastre? Ciertamente que no lo es, mientras
entendemos la dificultad más podemos avanzar. Avanzar en todo caso será ir más
lejos en cuanto a los puntos estratégicos del desarrollo de un país. Para esto
hace falta organización. Sabemos y entendemos que gran parte de lo que se puede
hacer depende de una conciencia clara de objetivos.
1-El vaivén.
Cada crisis económica muestra la
capacidad no solo de la estructura sino de la superestructura para avanzar
sobre las condiciones de posibilidad de una sociedad. Si esto no es revisado
nada se puede hacer. Muchas veces hay una cierta tendencia a la mitología que
parece que viene a suplir la capacidad para tener objetivos claros y distintos
sobre lo que una sociedad debería ser. Por estas razones los fetiches sobre los
relatos y cuánto de reales son, desplazada la idea de Utopía “sea del carácter
que sea” se ha hecho una fascinación ver la farsa como si tal cosa no fuera una
guerra muchas veces entre aparatos de propaganda. Sí podemos decir que esto es
parte de un capitalismo cultural y que como tal no se trata de reemplazar un
capitalismo cultural por uno muy parecido, no se trata de “Pepsi por Coca-cola” o viceversa. No tiene sentido pensar entonces
cuáles son aquellas cosas de las que podemos o no disponer simplemente a secas.
Tenemos demasiadas demandas de calidad institucional, lo que no tenemos son
respuestas políticas que digan ser una alternancia. Tenemos si puntas que
tienden a disolver muchas propuestas de organización. Podemos decir entonces
que en realidad gran parte de todo avance será la organización de las bases sin
que estas caigan en un excesivo autonomismo. A partir de una repuesta sobre
todos los conflictos existentes podemos ver la relación que existe si entre los
grupos con sus demandas pero también de los grupos con las amenazas. Cosa que
parece ser olvidada por un grupo especialmente generoso de post-marxistas. Se
da por sentado que un grupo que vive en la exclusión y el medio de una sociedad
organizada para su destrucción no tienen en sí muchas veces tantas alternativas
como las que nos gustaría pensar.
Esta es la razón por la cual se
puede decir que Argentina, la respuesta no es una disolución total de un
régimen político que deje una cáscara mínima. Esto es parte de lo que se podría
denominar y mal llamar sociedad civil. Por decirlo de alguna manera podemos
entender que algunos pluralismos son estériles. Pluralismos que llaman a la
idea de un espacio que es heterogéneo porque sí. En esta triste bolsa se pone a
todo lo que no le gusta al capitalismo moderno, no es raro escuchar en algunos
lugares el problema de los “pardos-verdes y rojos” o desagregado, el problema
de los fascistas que son el brazo terrorista del capital (en todas sus formas
desde el FN nacional francés a la
UCEP metropolitana sin olvidar las variantes que aparecen en
países como Grecia o Noruega); ellos en sus consagraciones pueden ser parte de la
idiotez útil del odio al extranjero sin más y de su expulsión, como también los
garantes por medio del terror de la sobre-explotación de la mano de obra. Luego
están los verdes en general que incluyen desde las personas que tratan de
consumir menos, hasta las personas que buscan reciclar o las personas que se
oponen directamente a emprendimientos contaminantes. Muchas veces estos son
puestos contra personas que buscan desesperadamente trabajo en un tira y afloje
estéril donde la manipulación tiene un primer lugar. Luego claro está se
encuentra el enemigo, todo aquello que ataquen al capitalismo por tal, por su
régimen de explotación y por su régimen de propiedad. Estos son los enemigos
número uno, y aquí caben muchas versiones posibles según los países. Existen
reivindicaciones que cruzan desde cuestiones de políticas locales a las
internacionales.
Los hijos del “Fin de la Historia ” de Fukuyama
existen en tanto que el capitalismo no ha muerto. Muchas malas interpretaciones
se han hecho al respecto. Se ha preferido devorar a estos opositores al capital
en todas las formas posibles, cooptación, terror, miseria y la directa
exclusión comunicacional. Gracias a todo eso, el capitalismo internacional
tiene un sistema de desarrollo y control poblaciones como jamás antes se ha
visto en este mundo. Ahora bien podemos saber que esto parece un ejemplo de
algo sumamente alienado. Pero pase a entenderse que no es así, las tres
promesas de un capitalismo más humano van a ir entrando en banca rota.
Primero si la negociación entre
el capital y el trabajo significa una pérdida para el trabajo este será un
punto sin retorno. Ya que a partir de allí es donde surge una heterogeneidad
sumamente mal interpretada la cual parecería constar con la idea de qué o solo
existen personas disgregadas con necesidades insatisfechas o sólo existe una
posibilidad de unión automática un frente anti-imperialista. Esta idealización
es la que ha llevado a más de un derrotero en el cual no se puede estar seguro
realmente de cuál sería el papel de la resistencia genuina ante estos procesos.
La pregunta es si realmente puede haber un papel intelectual que pueda cubrir
todos los problemas. Se puede decir sin duda que a cada experiencia de crisis
económica le toca un papel fundamental para las clases subalternas y sus
aliados. Es decir ¿Qué es lo que hay que hacer frente a las crisis del Siglo
XXI? ¿Cuáles son o serán las grandes conquistas del fututo?
Ciertamente tiene un papel justo
el cual se basa en el movimiento general de los actores sociales. ¿Se han
agotado ciertas estrategias? ¿Hay que dinamizar el papel de los sindicalizados,
no sindicalizados y desocupados? ¿Cuál sería su papel en un frente popular? ¿En
qué punto estos intereses se rompen definitivamente? Este es el proceso sobre
el cual se va definir lo popular y el desarrollo de la perspectiva más
socialista disponible. Esto no quiere decir mero posibilismo, no habría peor
traición que llevar sucesivas derrotas al campo popular. Como siempre la pelea
no es otra que la configura la pelea de las alas izquierdas de todo el mundo,
¿quién debe conducir? Este problema es teórico y político. Los horizontes de
posibilidad de una sociedad continúan por cierto camino hasta que las
condiciones para la reproducción del capital estallan o el que paga es el
pueblo trabajador en todas sus formas. Por lo que se entiende que la gran
derrota e lo que había sido la caída del muro es la parte más fundamental. Hubo
una crisis sobre la cual el capital avanzó. Ahora bien nuevamente podemos
entender lo que ha sido la evolución. Gran parte del éxito de algunos
movimientos populares en el mundo tiene que ver con la relación de esta crisis.
La resistencia de esos diez años al fin del milenio fue la clave para entender
que no fueron revisiones intelectuales sino que fueron la aparición de las
formas más elemental. En esta forma se ha logrado interpretar de manera clara,
la relación entre la actividad económica, el sindicalismo, y el papel de nuevas
organizaciones sociales. Esto ha sido lo que ha generado un papel fundamental
que ha dado paso a una serie de proyectos políticos. No es raro que los sujetos
que mantienen el poder de los multimedios no hayan dado un paso sustantivo a lo
que eran estos nuevos actores y lo que se han esforzado es a desestimarlos
apenas fuesen copados por cualquier razón. Así nacieron las nuevas críticas a
lo que había sido el fracaso del neo-liberalismo. En esto se dio papel a nuevos
actores, entre ellos, el “terrorista” que muchas veces es una parodia sembrada
por los propios imperialistas.
No podemos decir menos. Hoy en
día entendemos que no se trata sólo de lo que pueda ser una continuidad de un
proyecto político. Tiene que ver con las condiciones endógenas de su forma de
vida. Conformarnos con la idea que sólo la democracia formal es la que puede
dar validez a los reclamos populares es por lo menos limitado. Lo que se tiene
que entender es que este es sólo uno de los pasos de la asimetría del poder que
ha propuesto la burguesía imperialista y dominante. Es decir que cierta forma
de democracia donde la gran burguesía es la dueña de la llave es la única que
se desea como democracia real y posible. Es decir que el gran conflicto por la
propia idea de democracia es la que nos deja pasmados. Tanto que nos podemos
pensar si los que están en distintas formas de resistencias entienden todos lo
mismo. De cara a estas situaciones podemos entender una razón, no sólo será la
peor o la mejor administración de la instituciones sino que se trata del poder
mismo de las personas que demandan a la puertas del estado su condición por la
dignidad humana. Esto es lo que no puede terminar de ser resuelto por ninguna
democracia en ninguna parte del mundo.
Las democracias entonces son
atacadas por los medios, son medidas por las bases y son bastardeadas por las
corporaciones. Esto se da justamente en el proceso donde el capitalismo entra
en crisis. Cuando el capitalismo queda limitado la ganancia se puede repartir
sobre las personas que no tienen trabajo lo cual es su paso previo a su
incorporación al mundo del trabajo. Por esta razón podemos decir que no puede
existir una relación de perpetuidad para los planes sociales. Como tales no
pueden existir por siempre, o mejor dicho no puede ser una forma de vivir
sustentable. Lo cual no quiere decir que el capitalismo no haya fundado
justamente estas distintas estrategias de ayuda social, algunas genuinas y
otras alienadas. Las alienadas son las que sólo quieren que el problema de la
pobreza quede circunscripto a una población que no debería crecer o que debería
decrecer. Estos son los planes específicos y focalizados, los cuales parecen
que tienen que ser dados sin la movilización popular. Es decir que todos los
que tienen que recibirlos deben ser simplemente supervisados, por lo que se
entiende que en realidad, su supervivencia será limitada. Cuando no se va a
asegurar la salud y la educación esto no terminaría por dar el paso más
importante. Esta es la pregunta más fuerte, todo Estado entonces termina por
volver a su carácter que no es solamente hegemónico sino del mismo predominio
sobre estas relaciones internas. Sería muy pobre decir que sólo conviene pensar
en una totalidad igualitaria de por sí. La hegemonía es una función pero eso no
cambia la dictadura del sistema político. Esto es que los sectores populares
hacen un gran esfuerzo para sobrevivir en su representación política que será
la lucha parcial pero real por su emancipación económica. De estas estrategias
hay algunas más o menos lejos del estado pero debemos saber que la clave está
en naturalizar el control o el tutelaje de la pobreza por parte de los sectores
más acomodados de la sociedad. Es decir a meras fundaciones que sólo quieren
saber que las ayudas sean concretas. Por esto la ciudadanía no es suficiente,
ya de por sí toda la idea de democracia, el pensar en la mera representatividad
como la solución de los problemas como ese paso sobre el que llegará el reino
de los cielos es una estupidez. Por eso han existido a lo largo del XX varias
propuestas que han sido alternativas a la democracia, es decir como sus caras
contrarias. Esto es lo que ha derivado en América Latina, la cual ha tenido por
suerte la Democradura ,
y la Junta Militar.
Por estas formas es la manera en que se han entendido que nunca se terminaron
por pergeñar las idealizaciones por la democracia, por esta razón cuando se
piensa el populismo, este muchas veces parece laxo. Pero debemos tener en
cuenta que en esta serie de conflictos, son los que son claves hoy. Por eso
estos tres enemigos serían totalmente ajenos a la democracia. Esto es lo que
estamos olvidando en estas relaciones con el capital y el trabajo no se trata
ya simplemente de aceptar los ciclos y sus evoluciones como consecuencias espontáneas
por el contrario en cada uno de los momentos hay posibilidades para explotar
ganancias. Toda idea de partido, tiene que entender esto. No se trata
simplemente de un camino recto sino de un fragmentario. En este sentido, el
avance se hace progresivamente y esta progresión no es el mero reformismo. Muchas
veces y esto se puede ver en la periferia del mundo, el terriblemente
encarnizamiento, la guerra y el conflicto por la precariedad de la sociedad que
se trata no deriva en una captación de los sectores excluidos sino en su
sucesivo exterminio. En este sentido América Latina se encuentra en un punto
intermedio.
Comentarios
Publicar un comentario